Hambre Cero Nuevo León es un esfuerzo interinstitucional derivado del Plan Estratégico 2030 para erradicar la pobreza
extrema alimentaria y el desperdicio de alimentos en el estado, por medio de acciones coordinadas e
innovadoras del Gobierno, la iniciativa privada, la sociedad civil organizada y la ciudadanía.
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Luego de meses de trabajo, se desarrolló el modelo de la estrategia Hambre Cero Nuevo León, el cual consiste en 3 pilares y 4 ejes transversales.
Establecer las políticas y mecanismos que contribuyan a disminuir la pérdida y desperdicio de alimentos a través de la cadena de suministro de alimentos destinados al consumo humano para lograr identificar, captar, transformar y distribuir lo recuperado.
Contribuir a la seguridad alimentaria y mejorar el estado nutricio de personas en pobreza y en condiciones de vulnerabilidad, a través de brindar ayuda y orientación alimentaria, evaluando periódicamente el avance en al disminución de la carencia alimentaria.
Desarrollar las capacidades individuales, familiares y comunitarias para la autogestión, superación e inclusión social plena, mediante la coordinación de esfuerzos gubernamentales e institucionales.
Generación de prácticas innovadoras para satisfacer las necesidades sociales, creando esquemas colaborativos que propicien formas creativas de sinergia, compromiso y transformación; mediante un proceso científicamente sustentado a fin de estar en condiciones de transferir y replicar la experiencia.
En relación a la reglamentación vigente, representa un marco de actuación para la operación de Hambre Cero y sus actores, así como también permite atender vacíos legales mediante la creación de instrumentos jurídicos que faciliten el logro de objetivos y metas de la estrategia.
Proceso participativo que permita que Hambre Cero se posicione en los públicos meta, tanto en su conjunto como cada parte de su estructura resaltando su importancia específica; así como visibilizar a los actores clave reconociendo la contribución de cada uno; con la finalidad de motivar el interés de la sociedad en general para contribuir a lograr los objetivos de la estrategia.
Proceso científico y metodológicamente sustentado que monitorea cada etapa de Hambre Cero a fin de hacer oportunamente los ajustes necesarios y optimizar el aprovechamiento de los recursos, con el propósito de determinar el impacto y garantizar la sostenibilidad de la estrategia.